Se trata de lentes rígidas de diámetro grande. En la actualidad es uno de los segmentos de mayor crecimiento en el ámbito de las lentes de contacto y este crecimiento exponencial no es casualidad. Gracias a que son extremadamente cómodas y a que aportan una visión excepcional, se han convertido en las lentes mas frecuentemente utilizadas para el manejo de patologías corneales como el queratocono. Es por ello que si padeces una patología o irregularidad corneal es probable que te propongamos este tipo lentes.

Su utilización en la práctica clínica común es relativamente reciente y por ello se utilizan principalmente para el manejo de enfermedades de la superficie ocular. No obstante, su uso se está extendiendo poco a poco a pacientes sanos para la corrección de errores refractivos.

El queratocono es por excelencia la patología que mas se beneficia de estas lentes y recientes estudios han señalado los beneficios de este tipo de lentes para el manejo de esta patología corneal. No obstante, existen otras patologías que también se benefician de estas lentes.

• Degeneración marginal pelúcida: se trata de una patología corneal que cursa con irregularidad y adelgazamiento y que algunos clasifican como una variante del queratocono. En estos casos, las lentes esclerales aportan una superficie regular, enmascarando la irregularidad corneal. Aunque las lentes gas permeables también pueden aportar buena visión en estos casos, el centrado con las lentes esclerales suele ser mejor gracias a su mayor diámetro.
• Transplante corneal: en sus diferentes variantes, este tipo de cirugía persigue la recuperación de la transparencia corneal perdida por una patología corneal o un traumatismo. A pesar de que normalmente se recupera la transparencia corneal, en ocasiones la cirugía resulta en una irregularidad corneal. De nuevo, las lentes esclerales enmascaran la irregularidad para aportar una visión nítida.
• Traumatismo corneal: cualquier trauma que resulte en irregularidad corneal puede verse beneficiado por el uso de lentes esclerales. Al apoyarse fuera de la córnea, suele conseguirse una mejor adaptación que con lentes gas permeable de menor diámetro.
• Las lentes esclerales también pueden ser de ayuda para proteger la superficie ocular de agentes externos y para mitigar la sintomatología dolorosa asociada a algunas enfermedades oculares como:
  • Queratitis por exposición
  • Córneas neurotróficas
  • Dolor neuropático
  • Síndrome de Stevens-Johnson
  • Degeneración nodular de Salzmann
  • Degeneración marginal de Terrien
  • Enfermedad del injerto contra huésped
  • Penfigoide cicatricial ocular

La adaptación de este tipo de lentes requiere un alto grado de especialización ya que el ajuste debe ser óptimo para garantizar la comodidad y la visión. Gracias a nuestra experiencia adquirida tras un gran número de casos resueltos y al uso de tecnología exclusiva, nuestro porcentaje de éxito es alto.

Una de las claves de nuestro alto porcentaje de acierto es la utilización de la topografía escleral. Conocer el perfil de la parte del ojo donde se apoyan las lentes esclerales es de gran importancia para diseñar la lente. Trabajamos con diseños de lentes de contacto vinculados al software de este dispositivo y gracias a ello hacemos un diseño “guiado” o completamente personalizado para cada ojo.

Si ya has probado las lentes esclerales y no han funcionado, consúltanos. Quizás podamos ayudarte gracias a nuestra experiencia y al uso de tecnología exclusiva.